“Un enfoque holístico reduce los índices de obesidad y también mejora la salud general de la población”

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Updated: abril 30, 2024

Javier Butragueño es doctor en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. También es fundador de Obesity Management School y autor de “Entrena para la Vida”. Es vocal de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO) y participará en OrganicFIT de BioCultura BCN con una potente ponencia.

-¿En qué va a consistir el programa que has organizado para OrganicFIT/BioCultura?
-Hablaré de la importancia del movimiento para la salud; de entrenar para vivir… como explico en mi libro; y que la personas que conviven con la obesidad tienen algunos factores que tienen que tener en cuenta a nivel metabólico y que el ejercicio es un aliado clave en la mejora. Hablaré del microambiente de la obesidad en el tejido adiposo y en el músculo y sobre qué podemos hacer para solucionar este problema, el sobrepeso, que está creciendo de manera alarmante en todos los países de mundo.

ESPAÑA
-¿Por qué España es un país con cada vez más personas con obesidad?
-La tendencia creciente de la obesidad en España, como en muchos otros países, es multifactorial, e implica una combinación de factores genéticos, ambientales, socioeconómicos y de estilo de vida que contribuyen a este complejo problema de salud pública.
1.Cambios en los hábitos alimenticios: La dieta tradicional mediterránea, rica en frutas, verduras, pescado y aceite de oliva, se está dejando de lado en favor de opciones más rápidas y menos saludables. El aumento en el consumo de alimentos procesados y de alta densidad energética, junto con porciones más grandes, contribuye significativamente al aumento de la prevalencia de obesidad.
2.Estilos de vida sedentarios: La modernización y la tecnología han llevado a un estilo de vida más sedentario. Muchas personas pasan largas horas sentadas debido a la naturaleza de sus trabajos o a los hábitos de consumo de medios digitales y televisión, lo que reduce la actividad física regular, un factor clave en la regulación del peso.
3.Factores socioeconómicos: Existen desigualdades en la prevalencia de la obesidad que están relacionadas con el nivel socioeconómico. Las personas con menos recursos económicos a menudo tienen acceso limitado a alimentos frescos y saludables y suelen optar por alimentos más baratos, que suelen ser más calóricos y menos nutritivos.
4.Entorno urbano: La urbanización también ha influido en el aumento de la obesidad. En áreas urbanas densamente pobladas, puede haber menos espacios seguros y accesibles para la actividad física. Además, la publicidad y la disponibilidad omnipresente de alimentos no saludables pueden aumentar el consumo de estos productos.
5.Factores educativos y de conocimiento: La falta de educación nutricional también contribuye a la obesidad. Muchas personas no tienen pleno conocimiento de las pautas dietéticas saludables o no saben cómo aplicar esta información en la selección de alimentos.

Combatir la obesidad en España y en cualquier otro lugar requiere un enfoque integrado que incluya políticas de salud pública que promuevan dietas saludables y actividad física, educación nutricional desde edades tempranas, y la creación de entornos que faciliten un estilo de vida más activo y saludable. Además, es crucial tener en cuenta las necesidades y circunstancias. Hoy en día, el código postal importa más que la genética para tener problemas de peso graso.

PROPUESTAS
-¿Cuál es tu propuesta para reducir los índices de obesidad?
-Reducir los índices de obesidad es un desafío complejo que requiere un enfoque multifacético y coordinado que involucre a múltiples sectores de la sociedad. Aquí hay una propuesta integral que abarca políticas públicas, intervenciones comunitarias, y cambios individuales:

1)Políticas de Salud Pública:
Impuestos y regulaciones sobre alimentos y bebidas no saludables: Implementar impuestos a productos con alto contenido de azúcares, grasas saturadas y sal, y subvencionar alimentos saludables para hacerlos más accesibles y económicos.
Etiquetado claro y comprensible: Fomentar la implementación de etiquetas en los alimentos que proporcionen información fácil de entender sobre el contenido nutricional.
Restricciones de publicidad: Limitar la publicidad de alimentos y bebidas no saludables dirigida a niños y adolescentes.

2)Programas de Educación y Concienciación:
Educación nutricional en escuelas: Integrar programas educativos que enseñen a niños y adolescentes sobre nutrición saludable, preparación de alimentos y la importancia de la actividad física.
Campañas de concienciación pública: Desarrollar campañas que informen sobre los riesgos de la obesidad y promuevan estilos de vida saludables.

3)Promoción de la Actividad Física:
Mejora de la infraestructura urbana: Diseñar ciudades que promuevan la actividad física a través de parques, senderos para caminar y ciclovías.
Programas comunitarios de actividad física: Ofrecer actividades dirigidas gratuitas o a bajo costo en comunidades locales para fomentar la participación de todas las edades.

4)Atención Médica y Acceso a Tratamiento:
Prevención y manejo temprano: Fomentar la detección temprana y la intervención preventiva en el ámbito de la atención primaria.
Acceso a tratamientos multidisciplinarios: Asegurar que las personas con obesidad tengan acceso a un equipo de profesionales que incluya médicos, dietistas, psicólogos y entrenadores físicos.

5)Investigación y Desarrollo:
Fomentar la investigación sobre obesidad: Invertir en investigación básica y aplicada para entender mejor los mecanismos de la obesidad y desarrollar intervenciones más efectivas.

6)Colaboración Intersectorial:
Alianzas entre sectores: Promover la colaboración entre el gobierno, la industria alimentaria, organizaciones educativas y de salud, y la sociedad civil para abordar la obesidad de manera coherente y sostenida.

Este enfoque holístico no solo busca reducir los índices de obesidad, sino también mejorar la salud general de la población, reducir las desigualdades en salud y promover un entorno más saludable y sostenible para futuras generaciones.

COMIDA BASURA
-¿La comida basura sacia los problemas emocionales de las personas?
-La idea de que la comida basura pueda «saciar» los problemas emocionales es un concepto ampliamente discutido y tiene múltiples dimensiones. Comer alimentos considerados como «comida basura» (generalmente ricos en grasas, azúcares y sal) puede proporcionar una gratificación inmediata y temporal, lo cual puede hacer que algunas personas se sientan momentáneamente mejor cuando están lidiando con emociones negativas como el estrés, la ansiedad o la tristeza. Este tipo de alimentación puede activar ciertos circuitos del placer en el cerebro, liberando neurotransmisores como la dopamina, que provocan sensaciones de placer y recompensa. Sin embargo, este alivio es generalmente breve y puede llevar a un ciclo no saludable si se usa como un mecanismo de afrontamiento regular para los problemas emocionales. A largo plazo, el consumo frecuente de comida basura puede contribuir a problemas de salud física y emocional, incluyendo el aumento de peso, el desarrollo de enfermedades crónicas y la intensificación de los sentimientos de culpa o de baja autoestima después de comer de esta manera. Es importante abordar los problemas emocionales con estrategias más sostenibles y saludables, como la terapia, el ejercicio físico, técnicas de relajación, o actividades que fomenten una conexión social y un bienestar emocional a largo plazo. Reconocer el uso de la comida como una estrategia de afrontamiento es un primer paso importante para desarrollar respuestas más adaptativas y saludables a los desafíos emocionales.

DISRUPTORES ENDOCRINOS
-¿Tienen en cuenta los médicos alopáticos que los disruptores endocrinos, presentes en productos químicos nocivos, son obesógenos?
-Los médicos alopáticos, o médicos que practican la medicina basada en la evidencia convencional, son cada vez más conscientes de la influencia de los disruptores endocrinos en la salud, incluyendo su papel potencial como obesógenos. Los disruptores endocrinos son sustancias químicas que pueden interferir con el sistema endocrino del cuerpo, el cual regula las hormonas. Estas sustancias se encuentran en una variedad de productos, desde plásticos y pesticidas hasta cosméticos y electrodomésticos.
Relación con la obesidad: Los disruptores endocrinos pueden afectar el metabolismo, el almacenamiento de grasa y la regulación del apetito, factores todos relacionados con el desarrollo de la obesidad. Algunos estudios han sugerido que la exposición a ciertos químicos, como el bisfenol A (BPA) y los ftalatos, puede estar asociada con un aumento en el riesgo de obesidad. Estos compuestos pueden influir en funciones corporales tales como la producción de insulina y el equilibrio de energía, lo que puede llevar a un aumento de peso.
Conciencia médica y acción: La conciencia sobre los disruptores endocrinos y su impacto en la obesidad está creciendo entre los profesionales de la salud, impulsada por investigaciones emergentes como “Obesogens: a unifying theory for the global rise in Obesity”, donde proponen un modelo combinado OBS/REDOX en el que las sustancias químicas ambientales (en el aire, los alimentos, los envases de alimentos y los productos para el hogar) generan señales metabólicas autocrinas y endocrinas, incluidas las ROS, que subvierten los mecanismos reguladores de energía estándar, aumentan la secreción de insulina basal y estimulada, alteran la eficiencia energética e influyen en el apetito y el gasto energético, lo que conduce al aumento de peso.

BIOCULTURA
-¿Qué es para ti BioCultura?
-Para mí es un evento diferente al resto, con personas que están implicadas en su salud y que quieren conocer, adquirir información de calidad y que les aporte algo diferente. Mi experiencia en otros años es que el ambiente es de exprimir al máximo a los ponentes y su conocimiento para aplicarlo desde el primer momento.  La verdad que es un espacio de un gran interés porque reúne todas las patas importantes para mejorar la salud y creo que es genial que pueda haber este tipo de eventos para que mostremos la ciencia, las reflexiones y, ¿por qué no?, nuevas ideas que son importantes tenerlas en cuenta para nuestra salud siendo un poco rebeldes.