El mundo “bio” madrileño se presenta a todo el estado
El CAEM (Comité de Agricultura Ecológica de la Comunidad de Madrid) estará...
Ángeles Parra escribe un pequeño artículo de opinión ante el alud de consultas, por público y por privado, de amigos, familiares y socios de Vida Sana… ante el desafío del coronavirus.
Mi buen amigo Pedro Ródenas, uno de los mejores doctores naturistas con los que cuenta ahora mismo España, me ha dicho: “Para que caigamos enfermos de la nueva pandemia se tienen que cumplir tres factores: El primero, e imprescindible, es la presencia del microorganismo, en este caso el coronavirus. El segundo, el medio ambiente que facilita su difusión (clima, aglomeración de personas…). Y por último, el verdadero causante de la infección: el terreno que acoge y favorece la multiplicación del virus. Si el virus encuentra el medio ambiente adecuado para propagarse, pero el terreno donde se instala no le da cobijo, la enfermedad no se produce. La mejor forma de prevenir el Covid-19, la enfermedad producida por el coronavirus, es, por tanto, aumentar la inmunidad. Todos sabemos que hay una relación directa entre nuestras defensas y nuestros hábitos de vida. Una buena nutrición, a ser posible con alimentos de origen orgánico, y unos hábitos saludables de vida, utilizando recursos y productos respetuosos con nuestro entorno, aumentan la inmunidad y la resistencia a las infecciones, víricas o bacterianas, en cualquier época de la vida, al mismo tiempo que previenen posibles patologías de futuro. En cuanto a la duración de esta epidemia de Covid-19 en España, no tengo mucha idea, pero, por lo que he leído y oído, parece que se espera un aumento de infecciones en las dos o tres próximas semanas, para después iniciar un descenso, y tener controlada la epidemia de aquí a un mes y medio o dos meses”.
Es decir, sentido común. Y mucha prudencia. En estos momentos, todo el mundo es muy prudente al respecto, incluso los más “apocalípticos” del sector de las terapias naturales. El caso es que poco más podemos decir desde Vida Sana. Se trata de estar más fuertes que nunca ante todas las incógnitas que plantea la nueva pandemia. Si siempre recomendamos una nutrición con alimentos ecológicos, ahora lo vamos a hacer más que nunca. Porque son los que más respetan nuestro organismo y los que más refuerzan nuestra inmunidad. Determinadas hierbas medicinales (en orgánico) y una alimentación muy vitamínica también nos pueden ayudar en este sentido. En cuanto a los hábitos de vida, está claro: nada de alcohol y de tabaco, nada de enfados y malos rollos, buenas “vibras”, actividad deportiva prudente, buenos paseos, Naturaleza, aire limpio y sano… Y mucha higiene, también. Huir de las grandes aglomeraciones parece adecuado. Y también hay que huir del miedo: tanto en lo que corresponde a lo sanitario como a lo económico. De hecho, el miedo es un factor de riesgo que, como el estrés, contribuye a bajar nuestras defensas y debilitar nuestro sistema inmunitario.
Por otra parte comparto esta reflexión del psicólogo italiano F. Morelli: “Dejemos de buscar culpables o de preguntarnos por qué ha pasado esto, y empecemos a pensar en qué podemos aprender de todo ello. Todos tenemos mucho sobre lo que reflexionar y esforzarnos. Con el universo y sus leyes parece que la Humanidad ya esté bastante en deuda y que esta epidemia nos lo está viniendo a explicar, eso sí, a un precio muy caro”.
Poco más tengo que decir al respecto. Solo que contribuir más al sosegamiento que al pánico colectivo parece, asimismo, recomendable…