ELENA PITA/FUNDACIÓN BIODIVERSIDAD “En la Fundación tenemos en marcha distintas iniciativas para fomentar la economía verde”
El Patronato de la Fundación Biodiversidad ha nombrado como nueva directora a Elena Pita. El Patronato también ha aprobado una nueva línea de ayudas, dotada con cinco millones de euros, para apoyar la contratación de personas en situación de desempleo en entidades vinculadas con la economía verde y azul. La convocatoria forma parte del Programa Empleaverde de la Fundación.
Elena Pita es directora de la Fundación Biodiversidad desde julio de 2020. Previamente ha sido funcionaria de la ONU Medio Ambiente en la Oficina Regional para América Latina y Caribe, en Panamá. Ha trabajado también para la Unión Europea, como consultora y en la Delegación de la UE en Mauritania, para la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, para la Oficina Española de Cambio Climático y para la consultora AEPO en su oficina de Libreville (Gabón). Es ingeniera agrónoma por la Universidad Politécnica de Madrid y Master of Sciences del Instituto Agronómico Mediterráneo de Montpellier (IAMM).
-¿Satisfacción por su nuevo cargo?
-Siento una gran satisfacción, y también una gran responsabilidad, porque nos encontramos en un momento clave. Como sociedad, hemos sometido a los ecosistemas a una presión que sobrepasa su capacidad de regeneración natural, con la consiguiente pérdida de servicios ecosistémicos, lo que a su vez tiene importantes efectos económicos y sociales. Tenemos que contribuir a revertir este proceso urgentemente, y ayudar a construir un nuevo modelo de prosperidad, sostenible, descarbonizado, resiliente e inclusivo.
“A pesar de las alertas del mundo científico sobre la insostenibilidad de nuestro sistema, la pandemia del Covid-19 ha supuesto un shock para toda la sociedad que no nos esperábamos. Nos ha permitido ver de primera mano y de forma dramática lo estrecho que es el vínculo entre la degradación de los ecosistemas y la pérdida de los servicios que nos proporcionan, como servir de barrera y protección ante la propagación de zoonosis”
CAMBIO DE PARADIGMA
-¿En qué líneas va a incidir más?
-Este cambio de paradigma implica tanto cambios estructurales como culturales. Así, desde la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico pensamos seguir trabajando en la protección y recuperación de la naturaleza, en respuesta a nuestro mandato, prestando atención a los factores socioeconómicos, incluyendo los aspectos de género y de cambio de estilos de vida. Buscaremos también integrar el enfoque de soluciones basadas en la naturaleza para abordar los retos derivados de la reconstrucción verde.
-¿Con qué nos va a sorprender la Fundación Biodiversidad en los años en que usted sea su directora?
-¡Espero que sólo con sorpresas agradables! En este periodo, más que sorprender, la Fundación busca evolucionar, construyendo sobre sus logros, para afrontar el enorme reto de la transición ecológica y justa. Creo que la innovación, tanto tecnológica como relativa a los modelos de gestión eficiente de los recursos naturales, va a ser clave en el proceso de reconstrucción. Desde la Fundación, nos gustaría apoyar iniciativas innovadoras en este sentido.
22 AÑOS DE TRAYECTORIA
-¿En qué medida cree que el trabajo de la Fundación es conocido por el sector ecologista en nuestro país?
-Creo que, a lo largo de sus 22 años de trayectoria, la Fundación Biodiversidad ha conseguido que el sector la considere un apoyo para afrontar los retos ambientales que tenemos por delante. Gracias a nuestras convocatorias de ayudas, por ejemplo, hemos colaborado con más de 1.000 entidades, el 70% de las cuales han sido ONG’S, asociaciones y fundaciones, el 20 % Administraciones Públicas, PYMES y medios de comunicación, y el 10% restante ha sido el sector académico, universidades y centros de investigación.
-¿Cómo resumiría el trabajo hecho hasta la fecha?
–La Fundación ha realizado un trabajo intenso e importante. Por dar algunos datos, ha sido pionera, por ejemplo, en el trabajo de designación de Áreas Marinas Protegidas. España, con más de un 12% de superficie marina protegida, es uno de los pocos países que ha superado el objetivo de proteger el 10% de las regiones marinas en el año 2020 comprometido con el Convenio de Diversidad Biológica (CBD). A esto ha contribuido, de forma importante y sostenida, el trabajo de la Fundación en la última década. Además, en estos años ha trabajado con cerca de 200 especies, mejorando el estado de conservación de algunas tan emblemáticas como el lince ibérico, el oso pardo, el águila imperial, la tortuga boba o la posidonia. También ha gestionado 11 proyectos europeos, canalizando 77 millones de euros para la conservación. Gracias a algunos de estos proyectos europeos, como el LIFE Shara, contribuimos al desarrollo y a la implementación del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático. Y también se han impulsado la economía y el empleo verde y azul a través de los Programa Empleaverde y Pleamar, gracias a los cuales esperamos apoyar más de 500 proyectos en estos ámbitos.
LA PANDEMIA
-¿Cómo le ha sentado la pandemia a la Fundación Biodiversidad? ¿Cómo afronta la “nueva normalidad”?
–A pesar de las alertas del mundo científico sobre la insostenibilidad de nuestro sistema, la pandemia del Covid-19 ha supuesto un shock para toda la sociedad que no nos esperábamos. Nos ha permitido ver de primera mano y de forma dramática lo estrecho que es el vínculo entre la degradación de los ecosistemas y la pérdida de los servicios que nos proporcionan, como servir de barrera y protección ante la propagación de zoonosis. Ante esta “nueva normalidad”, la Fundación ha buscado, por un lado, adaptar su forma de trabajar, impulsando el teletrabajo, por ejemplo, y, por otro lado, reforzar algunas áreas de acción para dar respuesta a las necesidades de la sociedad española en este extraordinario periodo, como los programas de ayuda a la contratación y a la formación en materia de empleo verde, o la comunicación.
-¿De qué manera la producción ecológica es una de las apuestas de la entidad que usted dirige? ¿Cómo se materializa ese apoyo?
–En la Fundación Biodiversidad tenemos en marcha distintas iniciativas para fomentar la economía verde, y la producción ecológica tiene un papel fundamental en este ámbito. Ofrecemos diversas ayudas en el marco de nuestro Programa Empleaverde con el objetivo de luchar contra el desempleo, a través de ayudas a la contratación, y apoyar proyectos de formación y asesoramiento, con temáticas como la acuicultura y pesca sostenibles, la agricultura sostenible, la elaboración, distribución y venta de productos ecológicos y la ecoinnovación. Contribuimos bonificando contratos con entre 1.900 y 3.400 euros. Sin duda, estas ayudas representan una oportunidad para que el sector incorpore aspectos ambientales en sus procesos. En los últimos años hemos apoyado al sector de la producción y alimentación ecológica con más de un millón de euros, a través de 10 proyectos que han conseguido que más de 3.000 personas sean formadas o asesoradas en sostenibilidad, impulsando la creación de más de 150 empleos vinculados a la producción ecológica.