EL LIBRO/”COME PARA COMERTE EL MUNDO”/María Kindelán “Existe una correlación entre lo que comemos y nuestras enfermedades”

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Updated: septiembre 13, 2021
Este libro no habla de dietas, sino de cómo desarrollar la capacidad que todos tenemos de llevar cambios a la práctica, cambios que nos ayuden a rendir al máximo de nuestras posibilidades y vivir nuestro potencial como personas. El libro lo ha puesto en circulación Plataforma Edit.

María Kindelán cursó un máster en Nutrición Clínica y Ciencia Avanzada de los Alimentos, y, después de haberse especializado en Alimentación Consciente, Nutrigenómica y Cocina Energética por distintas escuelas, además de ser naturópata titulada por el Instituto Profesional de la Salud, realiza labores de asesoramiento nutricional y energético dirigidas a particulares y empresas.

-¿Hasta qué punto la mayoría de enfermedades que padece la gente tienen que ver con una mala habitación y nocivos hábitos alimentarios?
-Existe una correlación directa entre lo que comemos y las enfermedades que desarrollamos en la actualidad. Enfermedades como el cáncer, la infertilidad y la diabetes se relacionan con dietas desequilibradas, ricas en azúcar, alimentos refinados, grasas saturadas, exceso de proteína animal, pesticidas y transgénicos. Sin duda, somos lo que comemos, pensamos y sentimos. Comemos para fabricar nuestra calidad de sangre, y esto nos condiciona a todos los niveles, y por desgracia los hábitos de vida de muchas personas en la actualidad (gobernados por las prisas y la falta de orden, atención y micronutrientes)… provocan carencias y desajustes que a la larga se manifiestan en enfermedades crónicas. 

ALIMENTOS VITALES
-¿En qué medida tu propuesta de cambio hacia una alimentación correcta pasa por los alimentos ecológicos?

-Soy de la opinión de que la base de una nutrición  completa y eficiente pasa por el consumo de alimentos VITALES, cargados de enzimas y micronutrientes, no procesados y “LIMPIOS”, fáciles de reconocer y asimilar por nuestro organismo. De ahí la importancia de evitar residuos tóxicos derivados del uso de aditivos sintéticos, hormonas, antibióticos y plaguicidas. Los ingredientes ecológicos proliferan fermentaciones beneficiosas para la flora intestinal, y bacterias que refuerzan el sistema inmunológico, además de ofrecernos un sabor mucho más intenso y real y ser más respetuosos con la naturaleza.

COMER MAL
-¿Por qué comemos tan mal? ¿A qué se debe? ¿Por qué existe tanta pereza a la hora de dar el salto hacia otro tipo de alimentación?

-Considero que hay una falta enorme de formación veraz en relación a la alimentación, una asignatura pendiente en escuelas y hogares desde edades tempranas, orientada a la generación de buenos hábitos, a la identificación de necesidades reales de energía, reconocer el combustible adecuado, cómo usar la comida en nuestro beneficio, y crear una relación amable y disfrutona con los alimentos y nuestro propio organismo.
Sin contar con la influencia de la publicidad que fomenta la falta de atención en lo que comemos, la poca involucración personal en el acto de preparar la comida y la falta de hábito. Cambiar hábitos requiere de motivación, fuerza de voluntad y una buena guía de herramientas eficaces, asesorada y dirigida por un profesional de la salud. La pereza suele ser consecuencia de una falta de estímulo y no saber por dónde empezar a la hora de instaurar nuevos hábitos.