CAECV/José A. Rico “En la CV facturamos el 25% de todo el sector ‘bio’ nacional”

José Antonio Rico Navarro (54 años) es productor de uva de mesa ecológica de La Romana, una localidad de la comarca del Vinalopó Mitjà de la provincia de Alacant desde 1995. Gestiona una empresa familiar de manipulación, envasado y comercialización de uva de mesa de su propia producción y la de otros compañeros. Es el presidente del Comité d’Agricultura Ecològica de la Comunitat Valenciana (CAECV) desde 2015, aunque ya estuvo presidiendo la entidad entre 2005 y 2010. Desde el nacimiento del CAECV, además de presidente, ha ocupado el puesto de vocal en el Pleno del Órgano de Gobierno en casi todas las legislaturas. Se acerca BioCultura Madrid 2021 y muchas empresas valencianas estarán allí. Hemos querido conocer más de cerca el sector ecológico en la Comunitat Valenciana, que no deja de crecer.
 
Rico es una persona que vive por y para la agricultura ecológica. La considera una filosofía de vida de gran impacto social, ambiental y económico. Además, le encanta estar en contacto con la naturaleza. Entre sus principales aficiones es un gran amante del dominó, aunque juega mucho menos de lo que le gustaría. Y, claro, disfrutar con la compañía de la familia y amigos…

-¿Por qué la Comunitat Valenciana ha adquirido tanta fuerza en el sector ecológico?
-La apuesta por la Administración autonómica por el sector ha sido clave con la puesta en marcha del I Plan Valenciano de Producción Ecológica. Nuestra comunidad tiene una tradición agraria muy arraigada y una agronomía que permite la diversidad de cultivos con altas calidades, además de ser bien valorados por un consumidor cada vez más exigente. En los últimos cinco años, el número de operadores ecológicos en nuestra Comunitat ha crecido un 51%. La superficie certificada, un 86%; y facturamos el 25% de todo el volumen de negocio nacional. Qué duda cabe de que estamos en un excelente momento, pero debemos seguir trabajando para crecer de una forma ordenada y responsable y mejorar datos como el consumo interno y asegurar que toda la cadena, desde el primer eslabón (productor) hasta el último (consumidor), reciben y pagan un precio justo por lo que producen y consumen.

BIOCULTURA MADRID 2021
-¿De qué manera va a estar presente en BioCultura Madrid 2021?
-Las empresas valencianas certificadas en ecológico siempre adquieren un protagonismo especial en las ferias dedicadas al sector. Entre otras cosas, porque ofrecen una gran y selecta variedad de productos, combinando productos tradicionales y vanguardistas. Este año, el sector ecológico de la Comunitat Valenciana va a contar con un total de 16 empresas en BioCultura Madrid y me atrevería a afirmar que vamos a ser una de las autonomías mejor representadas. Además, vamos a participar, durante todos los días de feria, en una serie de degustaciones de productos de las empresas que están presentes en la feria. Se trata de una actividad que estamos llevando a cabo en los últimos años y que nos reporta buenos resultados, ya que los consumidores conocen, de primera mano, los diferentes proyectos de las empresas, sus productos, sus procesos de elaboración y, evidentemente, tienen la posibilidad de poder probarlos.

-¿Los productos valencianos ecológicos son bien conocidos en el resto del estado?
-El estado español puede y debe presumir de disponer de un modelo agrario con mucho oficio, un saber impresionante, pero eso en una sociedad tan sometida a la información y constante publicidad como la actual no parece suficiente para llegar al consumidor. Nuestro proyecto se basa en una serie de acciones informativas a los consumidores y potenciar a nuestras empresas la presencia en ferias importantes del sector.  Así, nuestros productos lo son porque donde vamos tienen una excelente aceptación y, en muchos casos, los visitantes de las distintas ferias acuden exclusivamente a comprar nuestros productos. De todos modos, debemos seguir trabajando para que sigan siendo conocidos, aceptados y consumidos. Por ello, la asistencia a ferias es tan importante para todas nuestras empresas.

LA CV EN TRES PALABRAS
-¿Cómo calificarías, en general, la producción ecológica valenciana?
-Única, variada e innovadora.

-¿Qué ha pasado con la pandemia? ¿Ahora se vende más online? ¿De qué forma ha afectado en la CV?
-Todos los indicadores han puesto en evidencia que los hábitos de consumo tienen más en cuenta que nunca aspectos como la salud y el consumo de proximidad. En esto, el sector ecológico tiene mucho que decir y nos preguntamos qué hubiera pasado con la cesta de la compra de los valencianos si la producción dependiera de países terceros. La sociedad está tomando conciencia de la importancia que tiene mantenerse sano y si lo hace a través del consumo de productos ecológicos, este objetivo es más fácil. La venta online también ha salido reforzada desde la pandemia y, en general, el sector en la Comunitat Valenciana ha salido reforzado de esta crisis sanitaria. 

GENERANDO RESPETO
-¿Qué es para vosotros BioCultura?
-BioCultura Madrid es una feria que genera respeto en el sector de la agricultura y alimentación ecológica en España. Que una feria como BioCultura vaya a celebrar su 36 edición este año en Madrid no es casualidad, ni fruto de la improvisación. Se trata de una feria pionera y asentada. Hoy es mucho más fácil encontrar ferias dedicadas en exclusiva al sector ecológico, pero lo difícil era encontrarlas hace tantos años.

-¿Hacia dónde creéis que se dirige el sector ecológico?
-Todo parece indicar que las distintas administraciones se están dando cuenta de la importancia que tiene la producción ecológica, no solo para la alimentación, sino para el respeto del medio ambiente y de todo lo que nos rodea. Que la Comisión Europea haya puesto en marcha la estrategia “De la granja a la mesa” es una nueva oportunidad para que el sector ecológico siga creciendo, y que lo haga en el marco de un sistema alimentario sostenible, reduciendo la dependencia de plaguicidas y fertilización química. El mercado de alimentos ecológicos seguirá creciendo y es preciso continuar fomentando la agricultura ecológica. Tiene un impacto positivo en la biodiversidad, crea empleo y atrae a jóvenes agricultores. Los consumidores reconocen su valor. Es necesario que las diferentes administraciones faciliten la conversión a este modelo de producción respetuoso y sostenible cuyos objetivos deben satisfacer a productores, consumidores y sociedad.