BIOCULTURA ON/PRIMER ENCUENTRO VIRTUAL DEL UNIVERSO ORGÁNICO “BioCultura ON será un revulsivo para la comunidad ‘bio’”

Ángeles Parra es directora de BioCultura y presidenta de Asociación Vida Sana… Lidera en este momento la gran aventura de crear BioCultura ON, la primera feria ecológica virtual. Todos queremos saber más sobre esta iniciativa pionera, insólita y que va a dar mucho que hablar… España es líder en el mundo en producción ecológica. Con BioCultura ON da un salto de gigante para ser también líder en distribución y consumo. Hablamos con su directora.

–¿Qué es BioCultura ON?
-BioCultura ON es el primer evento virtual de la comunidad “bio” donde organizaremos eventos y encuentros virtuales de todo tipo, sin limitaciones geográficas y a lo largo del año. Es un nuevo formato de evento virtual, una experiencia digital que reproduce la esencia de BioCultura combinando una amplia programación de actividades y una zona de expo virtual interactiva. Hubo una primera intentona en noviembre, pero ahora sí va a la vencida. Verdaderamente, todo está cambiando a un ritmo aceleradísimo y BioCultura ON necesitaba unos cuidados y una organización que ahora sí están garantizados. Con este primer evento damos la bienvenida a todos los seguidores de la cultura ecológica y el consumo responsable de todo el mundo.
Una herramienta digital que nos permitirá seguir reuniéndonos y relacionándonos. Todos los seguidores/as incondicionales de la cultura ecológica y el consumo responsable tienen en este nuevo concepto su punto de encuentro. Empresas, artesanos, productores, consumidores, emprendedores, ONG’s… jóvenes, adultos, de todas las edades y género. Esta es la transversalidad que ha logrado BioCultura en sus 37 años de existencia, es su mayor riqueza y de ella nos nutrimos todos los que queremos de verdad cambiar el rumbo de este desastre anunciado.

2021
-¿Cómo ha surgido esta “nueva “ BioCultura?
-Después de tantos meses ya de pandemia, tenemos todas las miradas puestas en cómo se desenvolverá el 2021. Las expectativas, las ilusiones, los deseos se amontonan, al mismo tiempo que las expectativas pintan que todavía tendremos unos meses de restricciones por delante, y por tanto con la incertidumbre a la que ya, lamentablemente, nos estamos acostumbrando. Nos resistimos a aceptar este mundo distópico en el que nos estamos adentrando a pasos agigantados, pero tampoco queremos seguir con la anterior normalidad que nos ha conducido al desastre. Evidentemente, llevamos mucho tiempo en todo esto y siempre estamos reciclándonos; las posibilidades digitales avanzan y nosotros hemos ido también mejorando gestiones, trámites, comunicación… Pero ha sido desde el confinamiento que surgió la idea de hacer una feria virtual. Estamos trabajando fuerte desde hace meses para que esta primera edición sea un éxito de convocatoria y de funcionamiento. Así las cosas, nos lanzamos a una nueva aventura, la BioCultura ON, un evento virtual que se ha ido gestando poco a poco, como lo hace todo en la Naturaleza, creando todas y cada una de las células para que el resultado sea excelente. Tendrá lugar del 21 al 23 de enero.

“BioCultura ON es el primer evento virtual del canal online de BioCultura donde organizaremos eventos y encuentros virtuales de todo tipo, sin limitaciones geográficas y a lo largo del año. Es un nuevo formato de evento virtual, una experiencia digital única que reproduce la esencia de BioCultura combinando una amplia programación de actividades y una zona de expo virtual interactiva”

IMPORTANTE PARA LAS EMPRESAS DEL SECTOR
-¿Por qué es interesante esta feria virtual para una empresa “bio”?
-BioCultura ON es también un canal para conectar productores, empresas y consumidores de cualquier lugar. Una plataforma para conectar, interactuar y vender. El formato virtual permite, sin duda, ampliar públicos y llegar a nuevos mercados, sin límites físicos, sin desplazamiento y de forma segura y sostenible. Desde la propia oficina, la empresa expositora  podrá conectar con potenciales clientes de cualquier lugar y cerrar ventas en tiempo real.  Hemos elegido una de las plataformas digitales más potentes del mundo para llevar a cabo este evento, asegurándonos así de que todo salga de maravilla y que además sea fácil de manejar para todos.

LA PRIMERA EN ESPAÑA/EUROPA
-¿Vais a ser los primeros en celebrar una feria ecológica virtual?
-Pues no conocemos ninguna otra feria como BioCultura que haya dado este paso todavía (la feria profesional Biofach sí que está proponiendo una feria solo para profesionales virtual). Existen diferentes ferias de otros sectores en formato virtual, híbridas incluso, y también infinidad de contenidos de todo tipo de temáticas que han proliferado en estos tiempos de Covid, pero ninguna como BioCultura. Esperamos que esta BioCultura ON sirva como herramienta para dar continuidad y más fuerza al sector de la producción ecológica, para mantener y fidelizar clientes ya habituales en el consumo “bio”, y, sobre todo, crecer a un nuevo público, en este caso millenial, aunque también empieza a despuntar un público más joven, los llamados generación Z que llegan con otros valores y que se acercan mucho a tendencias como la vegana, el valor de los productos de proximidad, y muy comprometidos con las causas ambientales. Ellos, confiamos, van a acelerar también esta tendencia de consumo “bio”. En este sentido este nuevo canal virtual va a tener un papel protagonista, ya que hablamos de una generación que ha nacido y crecido de forma natural en estos canales digitales y que, por tanto, en su forma de funcionar habitual… este entorno ya está muy arraigado. Según GlobalWebindex, 6 de cada 10 millennials están dispuestos a pagar más por consumir productos ecológicos, pero seguidos muy de cerca por el 58% de la Generación Z (personas entre 16 a 21 años).

PARA EL PÚBLICO
-¿Cómo podrá disfrutar el público de BioCultura ON?
-BioCultura ON no es un evento virtual más, sino un formato original. Una experiencia novedosa, atractiva y accesible para todos los públicos.  Igual que sucede en la feria presencial, el público podrá pasear por diferentes espacios del “recinto virtual”, asistir a conferencias, participar en actividades, visitar la zona de Expositores e interactuar con ellos, conocer a otras personas y profesionales. Todo de forma ágil, intuitiva y divertida. Es diferente a BioCultura física y, al mismo tiempo, es lo mismo. Todos nos tenemos que adaptar a las nuevas situaciones. El sector ecológico, también.

-¿Y qué pasa con las actividades que siempre han tenido tanto éxito en BioCultura: showcookings, talleres, charlas, debates, etc.?
-Habrá de todo, charlas, debates, talleres, showcookings, showrooms de eco-estética… Incluso  uno de los canales temáticos será para el público familiar con el habitual espacio MamaTerra. Fundamentalmente las actividades serán las mismas pero adaptando algunos formatos para la audiencia online,  porque no es lo mismo asistir a una conferencia en persona que verla a través de la pantalla… Pero nos estamos esforzando muchísimo para que sea atractivo y sobre todo provechoso. BioCultura ON va a ser un revulsivo para la comunidad “bio”.

UNA FERIA MUY “ORGÁNICA”
-Ya… pero el gran encanto de BioCultura siempre ha sido que era muy “orgánica” en todos los sentidos. ¿Cómo vais a hacer que, siendo lo virtual tan frío, no pierda ese encanto?
-Es cierto y, obviamente, el factor presencial y humano no se puede replicar, gracias a Dios. Va a ser una experiencia diferente pero no por ello ha de ser fría. Cada contexto (físico y virtual) tiene sus características, ventajas e inconvenientes. Y, en este caso, vamos a crear un entorno acogedor y potenciar formatos que permitan al público conectar con nuevas personas, interactuar con ponentes, expositores y protagonistas de las sesiones y generar comunidad.

-¿Tenéis idea ya de cuánto público va a visitar esta feria virtual? Las personas nos hemos acostumbrado rápidamente a funcionar digitalmente en el confinamiento…
-Es siempre muy difícil hablar de previsiones de la primera edición de un evento y más cuando todo es tan nuevo. BioCultura ha sido siempre pionera… Cuando empezamos con las ferias, hace casi 40 años, fue también una novedad, los consumidores no estaban tan concienciados y ahora BioCultura, antes de la Covid-19, congregaba más de 100.000 personas al año en toda España con sus distintas ferias. Con una feria virtual nueva no podemos predecir cuántas personas pueden conectar pero aspiramos a que la cifra sea muy elevada. Nos encantaría superar cualquier expectativa porque demostraría que estamos en la buena dirección y que los consumidores “eco” también somos personas conectadas e interesadas por los nuevos retos de los tiempos que nos ha tocado vivir. Por otra parte, hay que resaltar que las empresas expositoras de todos los sectores de la feria han demostrado y seguirán haciéndolo que tienen en su ADN no sólo los valores ecológicos y la ética incrustada en aquello que producen, sino también ese espíritu de superación e innovación que las hace tan especiales y tan dinámicas.
 
LA INTERNACIONALIZACIÓN DE BIOCULTURA
-¿La idea es poder llegar a mucha más gente que con la BioCultura presencial y poder desembarcar ante un público más internacional, por ejemplo?
-Este es, claramente, uno de los principales beneficios de lo virtual, la accesibilidad a nuevas audiencias sin barreras, en cualquier momento y en cualquier lugar. Con BioCultura ON abrimos un nuevo canal de comunicación para llegar a nuevos públicos y relacionarnos con ellos de diferentes maneras, más allá de las ferias presenciales. De esta manera, por ejemplo, esperamos abrirnos a las nuevas generaciones, gente joven y con un perfil más digital y fans de la cultura “bio” de otros países: en especial, de Latinoamérica, donde ya contamos con una gran comunidad de seguidores.

-¿Hacia dónde creéis que va el mundo? ¿O más bien cómo os lo imagináis?
–Según la Organización Mundial de Salud y la FAO: “Las enfermedades crónicas y degenerativas están experimentando un rápido crecimiento mundial y representaron un 60% aproximadamente de la mortalidad total, y un 46% de la totalidad de las enfermedades mundiales en el año 2001; se estima que esta última cifra alcance un 57% de la cifra total de enfermedades en el año 2020”. Este dato nos dice, por tanto, que, si consumiéramos de una forma sana, se reduciría el gasto sanitario con el dinero de todos. Habría también más gente en los pueblos con buenas perspectivas de futuro. Más relevo generacional en el campo y muchas más mujeres en los pueblos tomando decisiones. Una población más sana para vivir mejor con lo necesario. Más biodiversidad en nuestros ecosistemas y eficacia agraria contra el calentamiento global. Menos  monopolios en los insumos agrarios y en las semillas. Soberanía alimentaria. Vida digna para agricultores/as. Ganadería extensiva ecológica evitando además grandes incendios devastadores. En fin… Entre la agricultura industrial y la ecológica… no hay color.

LA TERCERA VÍA
-¿Hay una tercera vía entre la “antigua normalidad” destructora y las miserias de la “nueva normalidad”?
-Desde luego. La globalización ha sido un desastre para la alimentación. ¿Por qué tenemos que comer naranjas de China si aquí hay que tirarlas a la basura? Todo esto es una locura. Los intereses del comercio internacional poco tienen que ver con los intereses de nuestra salud y la del medio ambiente: se está demostrando que el consumo sin sentido y la globalización alimentaria nos conducen al desastre. Hay que tomar las riendas de nuestro consumo: eso es vital. Un consumo responsable, consciente, inteligente, ecológico, local, más vegetal que animal, más artesano… es lo que necesita nuestro mundo. Más consumo consciente. Y también más empatía, más esfuerzo en conocer a nuestro vecino agricultor, más colectivismo y menos individualismo. Muchas personas se están planteando muchas cosas. De hecho, ya somos cada vez más los que no queremos ni la “nueva normalidad” incierta, ni la antigua normalidad frenética y destructora. Hay otras vías. En BioCultura hemos demostrado por activa y por pasiva que hay formas de consumir y de producir que protegen el medio ambiente y la salud de los consumidores, que enfrían el clima y conservan las poblaciones rurales, que protegen la biodiversidad y las eco-nomías locales… Es hacia aquí hacia donde tiene que girar el mundo. No hace falta más crecimiento económico porque éste es en sí mismo insostenible. Ha llegado la hora de poner la mirada en la economía circular, en el cradle to cradle; no queremos más locura, sino más sentido común y menos “expertos de esos que nos han conducido al desastre”.